Me
intereso hoy en un tema de nuestra comunidad analítica: Los usos del
psicoanálisis y especialmente con la psicosis. Se entiende que la interrogación
apunta a la relación entre psicoanálisis puro y aplicado o en todo caso a la
diferencia de este último respecto de la psicoterapia desde la perspectiva del
pase. Son reiteradas las indicaciones de Miller –siguiendo los aportes de Lacan–
sobre el valor que tiene la psicosis para captar la estructura en tanto tal.
Pero fundamentalmente destaca cómo la psicosis muestra la impostura del sujeto
supuesto saber "redoblado cuando se viste de los oropeles del padre"
[1]. Asimismo subraya la similitud –por supuesto que también la diferencia– cuando
en el pase se verifica que los análisis conducen al punto "donde la
impostura paternal se revela con toda su crudeza" [2]. Por otro lado, J.
Lacan hace resonar en variadas ocasiones –como ya lo había mencionado– que el
alienado mental es el verdadero hombre libre. Subvierte la alienación en
libertad y lo vincula al fenómeno de
segregación. Es por que el loco es el hombre libre que Lacan indica que
" ustedes están en su presencia a justo título angustiados" [3]. La
angustia ante la libertad del loco lleva
según él a los diferentes modos de segregación. Esto último no deja de tener
sus consecuencias en la práctica del diagnóstico produciendo cierto horror al
mismo [4]. Cuestión que se hace más patente aún en la actualidad ante la
ampliación del campo de la psicosis con las "psicosis de la
democracia" [5] –psicosis ordinarias–
y la elaboración de la última enseñanza de Lacan. Es ante los psiquiatras que
Lacan propone un nuevo punto de vista para abordar a la locura desde el
psicoanálisis. En este punto ya no se refiere a lo que la psicosis aporta al
psicoanálisis y a la formación de los analistas, sino a lo que el psicoanálisis
le puede aportar a la psicosis. En ese sentido, si se trata de la libertad,
Miller señala que hay allí una cuestión ética y que es ésta la que le permite
distinguir el psicoanálisis aplicado a la psicosis, de la psicoterapia. Al
mismo tiempo, Lacan sugiere esperar de la experiencia precaria del fin de
análisis nuevos aportes para la aplicación del psicoanálisis a la psicosis.
Espera un "progreso capital que podría resultar del hecho que el psicoanalizado
se ocupe algún día verdaderamente del loco" [6].
Si el "riesgo"
[7] –como indica Miller– de la libertad del loco la encontramos en su
posibilidad de des-identificación y el horror lo hallamos ante lo que el loco
muestra como impostura del padre, entiendo en otros términos ahora lo que Lacan
alertaba desde muy temprano respecto de la comprensión. Hay un aspecto de la
misma referido a no responder desde la empatía –matiz al que alude
explícitamente Lacan en el Seminario 3–, pero hay otro aspecto siempre difícil:
no responder desde la impostura del padre. Ambos aspectos responden a la misma
estructura, aunque en el primero se articula con la relación imaginaria del
esquema Lambda y en el segundo se amplía a la limitación de la realidad edípica
y fantasmática de cada cual.
Entiendo
de esta forma lo que plantea en 1976 cuando habla del amor al prójimo de la
tradición judeo-cristiana y nos dice que "lo que se presenta al analista
es otra cosa que el prójimo" [8].
Concluyo
así, que cada vez que tratamos la diferencia en la singularidad de cada sujeto
–la des identificación en un caso de neurosis, como de psicosis, o lo héteros
de lo femenino– como si fuera de la misma parroquia, estamos en el campo de la
comprensión. Cuestión que se presenta muy especialmente en el acto de
diagnosticar. Si en su defecto al supuesto individuo de otra parroquia – o sea,
lo diferente– lo segregamos, también estamos en el campo de la comprensión. Así
la comprensión muestra su cara segregativa. En este sentido Lacan alertaba que
no alcanza con servirse inteligentemente de "su vocabulario para que esto
tenga el menor efecto sobre lo que es efectivamente la práctica analítica"
[9]. Entiendo que es por esta razón que espera del psicoanalizado un aporte.
Espera de aquel en donde la impostura paternal se revela con toda su crudeza.
Se ve así, que el ir mas allá del padre tiene su consecuencia clínica para el
sujeto en un psicoanálisis puro –en el camino hacia el fin de análisis–, empero
también tiene consecuencias en la formación del practicante que pretenda
abordar la diferencia en la aplicación de un psicoanálisis con consecuencias
efectivas y con eficacia terapéutica. Para concluir, hago extensiva la espera
no solo del psicoanalizado, sino del dispositivo del pase en lo que nos puede
aportar con su elaboración. Una Escuela que se ocupa del pase y que el mismo,
como dispositivo institucional, muestre sus consecuencias respecto de los usos
del psicoanálisis, hará –entre otras cosas– que se pueda evitar la
"reabsorción del psicoanálisis puro en el mundo psi" [10] y
establecer una clara diferencia del psicoanálisis aplicado con la psicoterapia.
Esto es, el psicoanálisis aplicado orientado por el deseo del analista. Así
mismo, si hay un "coraje" propio en el atravesar el límite de la
identificación, que en la psicosis se muestra como invención sintomática y
singular, Miller también propone el coraje del acto que supone la
des-identificación en un paso creativo. Me pregunto: porqué no pensar en una Escuela
cada vez más corajuda –el coraje de la creación– para dar respuestas a los
diferentes modos de presentación del síntoma en la actualidad. Es decir, una Escuela
que favorece a la soledad singular de sus miembros respecto de la
identificación, para que desde allí y en un lazo de elaboración colectiva
"cada uno y en cada día, tenga que re-inventar el psicoanálisis"
[11].
NOTAS
1.
Miller, J.-A.: "Sur La leçon des psychoses", en L’ experience psychanalytique des psychoses (Actes de l’ Ecole de la
Cause freudienne). Paris, Navarin-Seuil, 1987. p. 143.
2.
Ibidem.
3.
Lacan, J.: "Petit discours de Jacques Lacan aux psyquiatres", 10 de
noviembre de 1967. Inédito. (Nota A.S.: Existe una traducción de Ricardo
Rodríguez Ponte: “Breve
discurso a los psiquiatras”. Disponible en “El psicoanalista lector”: http://elpsicoanalistalector.blogspot.com/2009/12/jacques-lacan-breve-discurso-los.html).
4.
Sigo aquí una referencia oral de Miller que no he podido situar en alguna
publicación.
5.
Miller, J.-A y otros: La psicosis
ordinaria. Ed. Paidós, Buenos Aires, 2003, p. 224.
6.
Ibidem 3.
7.
Ibidem 1.
8.
Lacan, J.: "Prefacio a la edición inglesa del seminario XI", Ornicar 1, Ed. Petrel, pag. 43.
9.
Ibidem 3.
10.
Miller, J.-A.: "Respuesta a Ché Vuoi? Sobre la formación del analista en
el 2001". En: Caldero de la Escuela,
N° 87, Buenos Aires, noviembre, 2001, p. 16.
11.
Brodsky, G.: "Discurso a la asamblea general de la AMP". En: Caldero de la Escuela, N° 89, 2002. p.
45.